Lne. Oviedo, Eloy MÉNDEZ
La crisis ha dado un vuelco al mapa de la riqueza en Asturias. El aumento del desempleo y la pérdida de poder adquisitivo que sufre la región desde 2008 han propiciado un descenso de la renta per cápita en antiguos polos de actividad, en favor de otros que han sabido capear mejor los efectos del temporal gracias a su estructura laboral, según revela un informe publicado ayer por la Sociedad de Estudios Económicos e Industriales (Sadei). El deterioro se ha cebado especialmente con Siero, que empezó la primera recesión como el sexto concejo con más dinero por habitante y que ha caído a la posición décimo segunda debido a la fuerte destrucción de su tejido productivo. En el otro lado de la balanza se sitúa Navia, con un sexto puesto que lo sitúa por primera vez en el club de los pujantes, liderado de nuevo por Oviedo. Las Cuencas prosiguen su paulatino descenso, sólo frenado por las prejubilaciones y los servicios sociales.
El documento, que analiza la evolución económica durante el primer bienio de la crisis (2008-2010), revela una caída de la renta disponible ajustada neta o per cápita del 1,85%, al pasar de 18.550 a 18.208 euros. Además, alerta de que sólo el sector servicios consiguió un exiguo crecimiento del 0,2 por ciento, frente a las fuertes caídas de la agricultura y la pesca (del 18,5 por ciento) y de la construcción (del 13,6 por ciento). Estos factores han motivado, en buena medida, una nueva distribución territorial de la riqueza. «La brecha que separa a los municipios con menor y mayor renta por habitante está cercana al 25 por ciento», señalan los autores del estudio, que posiciona a once concejos por encima de la media autonómica.
La entidad local con mayor renta neta disponible por habitante es Oviedo, que ha conseguido liderar esta clasificación desde que comenzó la serie histórica, en 1994. Por detrás, se sitúan Castrillón, Llanera y Gijón, que mantienen posiciones muy similares a las que han ocupado durante las dos últimas décadas. Más llamativo es el quinto lugar de Carreño, en una escalada incesante de posiciones (era el 16º en 2002) que, según los expertos, se debe a dos motivos: el asentamiento de numerosas familias procedentes de otros municipios más ricos de la zona y su gran actividad industrial, concentrada especialmente en el límite oriental de su territorio y en Candás.
No obstante, la mayor subida en los puestos de cabeza corresponde a Navia, motor del Occidente, el ala con índices de renta más bajos. Este concejo ha conseguido una mejora espectacular desde que comenzó el siglo, cuando estaba situado en el puesto 19º. Su fuerte arraigo industrial, vinculado a los sectores naval, maderero y lácteo, están detrás de esta pujanza. Todo lo contrario ocurre en Siero, ejemplo de crecimiento durante muchos años gracias a su posición estratégica entre los grandes ciudades de la región. Su renta per cápita, que había iniciado un leve retroceso en los años previos a la crisis, se ha desplomado tras el inicio de la recesión, en paralelo a la fuerte destrucción de empresas que sufre su territorio, muy disperso demográficamente.
La lenta, aunque sostenida caída de la renta en muchos concejos mineros es otro de los puntos destacados del informe. Los autores señalan que la baja tasa de actividad que padecen las Cuencas explica que la el nivel de riqueza media de sus habitantes esté mucho más relacionado «con las prestaciones sociales y las pensiones» que con el salario bruto que reciben.
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Opinión de El Nuevo Faro de Tapia: En Tapia también podemos crear riqueza porque tenemos la suerte de vivir encima de un mar de oro. Otros concejos no tienen esa suerte, nosotros si.
Igual que la industria supuso para Navia un desarrollo, reparto de riqueza y crecimiento sin igual en todo el occidente, Tapia también podría beneficiarse de algo así. Eso no implica cerrar ganaderías, ni hoteles ni bares, todo lo contrario, en Navia todos esos sectores tienen un dinamismo mayor que en Tapia de Casariego, gracias a que la Industria ha conseguido afincar gente en el concejo y permitir otras actividades. ¿Cuántas ganaderías cerró la papelera de Navia? alguna claro que cerró, pero es porque el ganadero en cuestión pudo elegir su futuro: trabajar en Ence o tener ganadería. Lo mismo que pasaría en Tapia de Casariego (para temor de algún veterinario asustadizo).
Colectivos como la Casa Azul (de Navia por cierto) engañan y manipulan la conciencia de las personas con miedos y medias verdades. Una mina subterránea sin cianuro es mucho menos dañina ecológicamente que Ence-Navia o incluso Reny-Picot (sin tener en cuenta además que esas empresas se instalaron en Navia cuando las condiciones y exigencias medioambientales eran mucho menores que ahora). Esa es la realidad, y al final estamos perdiendo el tiempo. Ahora Navia también tendrá una planta de tratamiento de purines, aprobada y permitida por el gobierno local socialistas sin la mitad de las exigencias medioambientales que una actividad así pudiera ser exigidas. El silencio de la Casa Azul u otros colectivos ecologistas naviegos refleja que hay un interés oculto en el asunto de la mina de Tapia que motiva en sobremanera a estos colectivos, hasta el punto de mentir todavía con argumentos de que la mina es a cielo abierto o que existirá cianuración en la planta tapiega.
No es comprensible que Tapia de Casariego siga siendo un Concejo sin futuro industrial ante presiones y miedos que no corresponde con la realidad. Todo el mundo en Tapia de Casariego pide el mayor de los cumplimientos medioambientales. Dejar pasar este tren puede suponer que ya no hay otro igual para el desarrollo del Concejo.
Como dato anecdótico indicar que el periodista de La Nueva España escribe desde Oviedo, es decir, no es un periodista de ese diario del occidente. Generalmente el periodismo del occidente no le gusta destacar el poder social y solidario de reparto de riqueza de la industria y solo hablar de fiestas y actos festivos-populares (por supuesto, no vamos a ser mal pensaos, será solo casualidad).